Las mariposas “saben” por donde vuelan. Estos hermosos insectos que casi han sido etiquetadas como “prototipo de indecisión”, que van de flor en flor sin rumbo fijo…, dicen ahora los investigadores que no es ese su verdadero comportamiento. Un reciente equipo de investigadores británicos de Rothamsted, en Hertfordshire, acopló minúsculos dispositivos de radar al dorso de mariposas del tipo Inachis Io y Aglais Urticae y rastrearon sus rutas de vuelo. El ajuste de estos dispositivos debe haber sido uno de los más intrincados desafios tecnológicos realizados en la vida animal. Las delicadas criaturas tuvieron que ser sujetadas, aplicárseles pequeños “bikinis” de cera, adaptados a su tamaño y luego sujetar los dispositivos de radar, de 12 miligramos de peso. Anteriormente ya se habían usado tales dispositivos para rastrear el vuelo de las abejas y abejorros. Los insectos podían volar sin problemas ya que los aparatos pesaban entre un 4% y 8% de su peso corporal. Pudieron ser observados jugando, alimentándose y aun apareándose. “Es obvio que no tuvieron problemas con los aparatos”, afirma Lizzie Cant de Rothamsted. “Las mariposas son buenos polinizadores y quería saber si siguen o no trayectorias lineales, siguiendo por ejemplo las hileras de las vallas, o si pueden volar directamente campo a través, cuando a distancia ven un terreno al que quieren ir”. Las evidencias obtenidas hasta ahora muestran que pueden dirigirse directamente al objetivo seleccionado. (Imagen de la portada “Mariposa Inachis Io provista de miniradar”).
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